La santísima trinidad:
La iglesia dedica el siguiente domingo después de Pentecostés a la celebración de día de la Santísima Trinidad. Un misterio es todo aquello que no podemos entender con la razón, es algo que sólo podemos comprender cuando Dios nos lo revela. El misterio de la Santísima Trinidad "Un sólo Dios en tres Personas distintas", este es el misterio central de la fe y de la vida humana, pues es el misterio de Dios en Sí mismo.
La fórmula de la santísima trinidad aparece en el bautismo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo (Mateo 28:19). El apóstol Pablo cerró una de sus epístolas diciendo "La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todo vosotros", (Juan 5:7). El hecho de que solo hay un Dios se puso de manifiesto en el Antiguo Testamento, en Isaías dice: "Ustedes son mis testigos, dice Yahvé, y son mi servidor, que he elegido; sépanlo, pues, y crean en mí y comprendan que Yo Soy. Ningún Dios fue formado antes de mí, y ningún otro existirá después". (Is. 43:10)
El comprendio del Catecismo de la Iglesia Católica lo explica así: "La iglesia expresa su fe trinitaria confesando un solo Dios en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Las tres divinas Personas son un solo Dios porque cada una de ellas es idéntica a la plenitud de la única e indivisible naturaleza divina. Las tres son realmente distintas entre sí, por sus relaciones recíprocas: el Padre engendra al Hijo, el Hijo es engendrado por el Padre, el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo. Los humanos son bautizados por un sacerdote y diciéndole "En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo".
La trinidad se sustenta en la revelación divina dejada por Cristo. Esto significa que la trinidad solo puede probarse a través de la revelación divina que Jesús nos trajo. No se puede demostrar por la razón natural o únicamente desde el Antiguo Testamento. Dios ha dejado huellas de su trinitario en la creación y en el Antiguo Testamento, pero la intimidad de su ser como Trinidad Santa constituye un misterio inaccesible a la sola razón humana e incluso a la fe de Israel, antes de la Encarnación del Hijo de Dios y del envío del Espíritu Santo. Este misterio ha sido revelado por Jesucristo , y es la fuente de todos los demás misterios.
Buen blog
ResponderBorrarBuen blog, me gusta mucho el tema
ResponderBorrarGracias.
BorrarBuen blog, bien explicado y organizado
ResponderBorrarUn buen tema
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